La semana pasada el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, reveló que se han adelantado conversaciones con los dueños de los derechos de la Fórmula 1 para llevar a la 'Arenosa' el evento. Luego de el anuncio, muchos colombianos se preguntan acerca de la viabilidad del desarrollo de la carrera y lo han contrastado con las diversas propuestas deportivas realizadas durante el gobierno de Iván Duque.

En medio del taller ‘Construyendo País’, llevado a cabo el pasado sábado en Repelón (Atlántico), tanto Pumarejo como el Presidente indicaron que se viene desarrollando una propuesta para albergar un evento de la máxima categoría del automovilismo en Barranquilla, ciudad que en los últimos años se ha convertido en el epicentro deportivo del país, entre muchas razones, por las actualizaciones en el estadio Metropolitano y la inauguración de la sede de la Federación Colombiana de Fútbol. Sin embargo, los precios para poder desarrollar el evento y diversas situaciones que ocurren en la ciudad, como lo es el tema del Aeropuerto Internacional Ernesto Cortissoz, generan más dudas que certezas.

En el anuncio realizado por Jaime Pumarejo, Iván Duque y Elsa Noguera, gobernadora del departamento, se revelaron algunas cifras de lo que podría significar para el país. Las investigaciones previas a realizar una propuesta a la empresa organizadora del evento indican que cerca de 320.000 personas, en promedio, asisten en el fin de semana de competencias. “Hay veintidós ciudades en el mundo que pueden decir que tienen un circuito de la Fórmula 1. Entran 60 mil turistas internacionales en un lapso (promedio) de 10 días. Eso es casi que duplicar el número de visitantes internacionales que vienen al Atlántico en tres días y en un solo evento”, aseguró, además, y comparando las cifras que arrojan otros Grand Prix a nivel mundial, gastan en promedio 600 dólares al día y viajan desde más de 100 países”, aseguró Pumarejo.

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Llevar a cabo el evento puede significar una gran inversión para el país, tal como lo indicó el director de la Revista Motor, José Clopatofsky, quién demostró que se necesitarían, al menos, 100 millones de dólares, destinados para infraestructura y una inversión inicial de 50 millones para cuestiones de derechos. Además, Clopatofsky reveló que la empresa Liberty Media, firma organizadora del evento, pide esa cantidad de dinero para garantizar el desarrollo de la carrera por un mínimo de 10 años, motivo que llevaría a Barranquilla a adecuar año tras año el circuito, generando un gasto inmenso. Sin embargo, la inversión social si es un aspecto positivo, en el sentido de los beneficiaros que tendría la carrera, ya sea en los hoteles, parqueaderos, restaurantes, entre otros.

De concretarse la idea, ya se habla de una propuesta formal de circuito, Colombia formaría parte del selecto grupo de países latinoamericanos que han albergado un evento de esta índole, compartiendo con México, Brasil, que actualmente hacen parte de las 23 carreras anuales, y Argentina, este último tuvo su último premio en el año 1998.