“No hay nada que le guste más a la gente que una verdad envuelta en un buen chiste”. Milo Yiannopoulos.

A principios de este mes, el reconocido comediante Dave Chapelle sacó su nuevo especial “The Closer” en Netflix.  Un especial de comedia en el que critica muchas ironías del mundo políticamente correcto en el que vivimos hoy en día. En un mundo donde Amazon pone el arcoiris LGBTI en su logo para parecer una compañía con consciencia social, y después obliga a sus trabajadores a defecar en una bolsa para hacer sus envíos a tiempo, Chapelle se animó a decir muchas verdades con la gracia que solo lo puede hacer un gran maestro de la comedia.

Chappelle hace referencia al rapero Dababy, y como este fue más repudiado por los medios de comunicación por decir cosas contra los homosexuales que por asesinar a una persona en Walmart.  Chappelle se atrevió a resaltar la ironía que hay en el hecho de que una mujer a la cual nunca le ha llegado la menstruación como Catlyn Jenner, haya sido nombrada como “mujer del año”. Una valentía impresionante considerando la cultura de la cancelación en la que vive Estados Unidos hoy en día. Chapelle tiene claro que el deber de las grandes obras creativas es poner a la gente a pensar en lugar de decirles qué deben pensar.

La semana pasada, varios empleados de Netflix hicieron una protestas para pedirle a la plataforma que sacara el contenido de Chapelle de su plataforma. La mayoría de empleados de Netflix son personas que recibieron la mejor educación disponible en la historia de la humanidad, sin embargo , no les enseñaron a cómo soportar un chiste. Los principales medios de comunicación fueron muy críticos de “The Closer” y acusaron al especial de ser racista , xenofóbico y transfóbico. La clasificación de los críticos al especial fue bajísima,  sin embargo, el público general fue bastante receptivo al especial, y este llegó a ser uno de los contenidos más vistos en Netflix, solo superada por “El Juego del Calamar”. Cada vez es más claro como aquellos que evalúan los trabajos creativos hoy en día les importa más que estos vayan en concordancia con una línea ideológica que la sustancia y calidad de los mismos.

En junio, cuando el reconocido director de cine Quentin Tarantino fue al programa de Joe Rogan, hizo referencia a esto. “Especialmente en este último año, da la impresión que  la ideología es más importante que el arte. La ideología triunfa sobre el arte. La ideología triunfa sobre el esfuerzo individual. La ideología triunfa sobre el bien. La ideología triunfa sobre el entretenimiento", señaló.  Querer censurar a alguien solo porque sus chistes hieren los sentimientos de un grupo de personas es un ataque sistemático contra la comedia y la libertad de expresión. Los buenos comediantes deben correr el riesgo de ofender con su comedia, puesto que la buena comedia es aquella que hace a la gente pensar y discutir a partir de ella.

Últimamente el mundo del entretenimiento ha normalizado este comportamiento totalitario de la cultura de la cancelación.  En el 2019,  Kevin Hart fue despedido como el maestro de ceremonias de los Premios Oscar debido a sus tweets viejos. Hoy hay que vivir en un mundo donde aquellos valientes que toman el camino creativo deben vivir en constante miedo de decir algo que acabe con su carrera. Impedir que aquellos que se dedican al trabajo creativo corran riesgos puede tener efectos tóxicos para la cultura, pues son estas personas en la sociedad las que están encargadas de correr el riesgo de ofender a alguien para que su trabajo trascienda.

En su especial, Dave Chappelle cuenta la historia de su amiga y colega Daphne. Una mujer trans la cual se suicidio a comienzos de este año .Chapelle la había apadrinado en el mundo de la comedia, y la invitaba a ser su rutina al principio de sus espectáculos. Según su familia, Daphne se suicidio debido a los ataques que la comunidad trans le propicio por ser amiga de Chappelle. El arte y la cultura son las cosas que nos deberían unir en lugar de separarnos. Tenemos que dejar de mirar el mundo por los lentes de la política, y dejar ese infantilismo de buscar evidencia de racismo y machismo hasta en las películas de Disney.