En una entrevista que le realizó la revista Semana al expresidente Álvaro Uribe, se tocaron temas importantes y de controversia en el orden político nacional e internacional. Uno de estos fue el suceso de los falsos positivos.

Uribe salió en defensa de la seguridad democrática, la cuál fue una bandera de su Gobierno y enfatizó en que esa política de seguridad era una cosa, y los falsos positivos no tenían relación con la misma, de ser así, el país no habría avanzado como lo hizo en su administración.

Por tal motivo, sacó a relucir nuevamente cifras que apoyaban su intervención en medio de la entrevista, destacando que antes de su gobierno, en el país ocurrían anualmente 28.000 asesinatos y tras finalizados sus dos periodos, esta cifra se redujo a la mitad. Los secuestros descendieron en un 90%, así como el asesinato de periodistas y líderes sindicales.

Recalcó también que los falsos positivos no fueron una política de altos mandos militares ni del presidente de la República. A pesar de eso, pidió disculpas publicas a las madres de Soacha y demás. Estas disculpas las ha hecho en conferencias, así como también en su libro publicado en 2012 titulado "No hay causa perdida", donde hace un paréntesis a este doloroso episodio y dedica un capítulo de la obra.

Por último, hizo énfasis en que sus disculpas han sido sinceras y no se han generado por la presión de organismos creados en el marco del proceso de paz con la guerrilla de las FARC.