Empresas Públicas de Medellín (EPM) y la constructora llegaron a un acuerdo para continuar con las obras. En primera instancia, se habla de un preacuerdo integral en el contrato, con el fin de que se puedan avanzar las obras y continuar con el proyecto más grande en materia energética.

Luego de todos los imprevistos que se han generado al rededor de Hidroituango, entre los cuales se encuentran las afectaciones a los habitantes y los riesgos por taponamientos y derrumbes, que datan del 2018, EPM confirmó que las obras avanzarán y presentarán los primeros resultados en el 2022. “La prórroga del contrato con el consorcio constructor CCCI posibilitaría garantizar la continuidad de las obras en la futura hidroeléctrica y cumplir con los cronogramas previstos para el inicio de la operación comercial de las dos primeras unidades de generación de energía en el segundo semestre de 2022″, explicaron. "Tanto EPM como el consorcio CCCI adelantan gestiones internas adicionales que son necesarias antes de suscribir el acuerdo logrado a la mayor brevedad”, agregaron.

Los términos del preacuerdo hacen evidente que los primeros tres meses del año 2022, estarán destinados para lograr un empalme con las nuevas empresas constructoras que se harán cargo del proyecto. Cabe resaltar que las nuevas empresas de construcción serán escogidos a través de una licitación que se abrirá.

La noticia de la continuación de las obras llega en un momento dificil para la empresa de Medellín, tomando en cuenta quela Superintendencia de Servicios Públicos (Superservicios) impuso una sanción por más de $1.800 millones de pesos al Grupo EPM por los 1.200 días de retraso en la entrega de avances de la obra.